Excedente productivo

Durante el Neolítico, se procesaron una serie de cambios fundamentales para los hombres, a tal punto que el historiador Gordon Childe hizo referencia a una "Revolución Neolítica".  Entre dichas modificaciones, podemos mencionar como una de las fundamentales, el surgimiento del "excedente productivo". Dicho factor está directamente asociado con el surgimiento de la agricultura y la ganadería incipientes, muy probablemente fruto del trabajo de la mujer. Comenzaron a incrementarse las funciones que los individuos debían desempeñar y, como se necesitaba una forma de organización, surgió la división de tareas, al comienzo por sexo y edad; posteriormente, la misma se aplicaría dentro de cada género.

El pasaje de una economía depredadora, a una economía productiva posibilitó: 

- un aumento de la población.

- el asentamiento de las comunidades en un lugar fijo (al menos por un cierto tiempo, ya que el desconocimiento de las técnicas de fertilizacíón, obligaba a realizar traslados periódicos provocados por agotamiento del suelo, los cuales se hicieron cada vez menos frecuentes).

- el surgimiento de un excedente productivo, derivado de un incremento de la producción a niveles que superaban las necesidades de alimentos de la comunidad.

La configuración de dicho excedente aparece estrechamente ligado a una serie de cambios:

- Estratificación social: Algunos integrantes de la comunidad, comenzaron a recibir una porción mayor al resto y esto determinó la división entre "Privilegiados" y "No privilegiados". Los "privilegiados" estaban directamente vinculados al surgimiento de una clase gobernante y de la propiedad privada de la tierra, luego de millones de años de vida del homínido sobre la tierra, sin que ello existiera

- Reserva de alimentos: El superávit productivo permitió construir depósitos para los alimentos (el primero en cumplir esa tarea fue el "Templo"). De ese modo, la comunidad pudo reservar víveres para los períodos de escacez.

- Intercambio: La porción de excedente productivo no destinado a los privilegiados o a reserva de alimentos, paulatinamente comenzó a ser intercambiada con otros pueblos, dando origen al comercio. Por ejemplo: los cereales, la madera y el vino fueron de los primeros productos en ser intercambiados. El intercambio estimuló, asimismo, la industria marítima y la formación de ejércitos, como forma de asegurar el trasporte y la protección de la economía.